1.- Generalidades

Las instalaciones con tuberías a presión en zanjas con pendientes superiores al 2,5% (1,9ᵒ) son vulnerables a la erosión por aguas superficiales de escorrentía, y en aquellas con pendientes superiores al 10% (6ᵒ) el deslizamiento de los tubos se presenta ya como una posibilidad, por tanto se requiere de medidas preventivas.

Además, la combinación de la instalación de la tubería en pendiente con el uso de materiales expansivos en los rellenos de la misma, puede ser el motivo de asentamientos y corrimientos en el terreno que provoquen desacoplamientos de las tuberías en el interior de la zanja y consecuentemente fugas, de tal manera que el ángulo en el que una pendiente puede volverse inestable varía en función de la calidad del suelo

Suelos expansivos son los suelos constituidos por materiales arcillosos, margosos o limo-arcillosos, así como anhidritas que se transforman en yesos. Estos materiales, se hinchan por hidratación y se agrietan en la retracción, por lo que no es recomendable su uso para cimentaciones y asentamientos de las tuberías y mucho menos en instalaciones de tubería en pendiente.

Suelen provocar roturas y fugas por asentamientos diferenciales. El riesgo de inestabilidad se incrementa en gran medida cuanto mayor sea el ángulo de inclinación.

Como criterio general, si se deben colocar tubos en pendientes mayores a 20 % (11ᵒ) o en instalaciones aéreas donde se sospeche que el terreno sea inestable, las condiciones de apoyo han de haber sido constatadas mediante la correspondiente investigación geotécnica.

En esos casos, se deben ejecutar muros de contención que transmitan las cargas de deslizamiento de los tubos al terreno no alterado, minimizando las cargas a flexión no deseadas. La distancia entre los mismos dependerá de la pendiente y características de las canalizaciones.

2.- Instalaciones enterradas

Las tuberías unidas mediante junta elástica se pueden instalar en pendientes superiores al 20% (11°), siempre y cuando se respeten las siguientes condiciones:

• Que la estabilidad a largo plazo pueda ser garantizada por un diseño geotécnico adecuado

• Debe utilizarse como apoyo y relleno principal, suelo tipo SC1, estabilizado con cemento como material de relleno del tubo

• Deben ejecutarse una o varias “costillas” de anclaje a lo largo de cada tramo de tubería, cuyo dimensionado y tipología irá en función de los requerimientos hidráulicos y mecánicos exigidos a la instalación. Los asientos de apoyo y fijación se realizarán de forma que no produzcan tensiones, fricciones o deterioro de la tubería y accesorios.

• Se recomienda que la instalación comience en el punto más bajo y ascienda por la pendiente, aunque si se sigue el procedimiento constructivo anteriormente definido, el sentido de instalación es indiferente. En cualquier caso, cuando se comience por el punto más bajo, cada tubo será rellenado hasta el nivel del suelo antes de la colocación el próximo tubo en la zanja.

• En caso de la instalación de la tubería en zonas de pendiente se recomienda la instalación de zanjas o cunetas de recogida de agua de escorrentías, controlando así la erosión y el hinchamiento de arcillas, evitando las coladas de barro y la solifluxión.

• De forma paralela, se recomienda la instalación de una tubería de drenaje que impida la saturación del terreno de relleno y el lavado de materiales, y asegure la adecuada resistencia al corte del suelo.

• Si las pendientes de la zanja son superiores al 10%, la tubería se ha de colocar en sentido ascendente. Si esto no es posible, deben tomarse las precauciones necesarias para evitar el deslizamiento de la misma. Si se precisa reajustar algún tubo, deberá levantarse el relleno y prepararlo como para su primera colocación.

• Los tubos han de instalarse en alineación recta (+/- 0,2°) con un mínimo espacio entre las copas de los tubos.

• El movimiento absoluto a largo plazo del material de relleno en dirección axial del tubo deberá ajustarse a los valores de desviación angular permitidos indicados para cada material.

• El movimiento absoluto a largo plazo del material de relleno en dirección axial del tubo deberá ajustarse a los valores de desviación angular permitidos indicados para cada material.

• Si es necesario un diseño en especial, debe consultarse con el proveedor de las tuberías y asegurarse del correcto uso de las indicaciones en fase de ejecución.

• La superficie de la zanja deberá estar configurada de modo tal que no existan depresiones y se evite la formación de acumulaciones de agua. La acumulación de agua en una ladera puede reducir la estabilidad de la misma

El presente documento recoge una serie de recomendaciones basadas en la experiencia que no deben de ser tomadas como definitivas. La realidad de cada caso será la que determine el proceso constructivo a ejecutar, basado en el conocimiento del terreno, la propia pendiente del perfil y otros requerimientos a los que será sometida la instalación.

En cualquier caso, será el Proyectista o en su defecto la Dirección de Obra quien defina el procedimiento a seguir, el cual prevalecerá sobre cualquier recomendación definida en este documento técnico para garantizar la seguridad de la instalación y de las personas que participen en el proceso constructivo.